Petaa, más conocido para sus amigos como Manuel Di Rita, es un artista italiano cuyos murales de formas geométricas imposibles son capaces de descentrar incluso al más observador. Pese a elaborar la mayoría de sus piezas sobre superficies planas, es un experto a la hora de jugar con las perspectivas, la composición y los colores con una técnica magistral, creando estructuras en lugares donde realmente no las hay o, en caso de haberlas, generar la duda de hasta dónde llegan los elementos «artísticos» y cuáles son realmente físicos dentro de la propia arquitectura, alterando la percepción del espacio y la «realidad» de quien se para a mirar.

El graffiti llevado a otros niveles, vaya.